La vi llegar
La vi llegar (I Saw Her Arrive) is the title of a tango written by Julián Centeya in 1944. The music was composed by Enrique Francini.
Contents
Recordings
At the moment, there are no recordings for this song stored in the TangoWiki. If you have sources, add a new recording.
Lyrics
La vi llegar...
¡Caricia de su mano breve!
La vi llegar...
¡Alondra que azotó la nieve!
Tu amor -pude decirle- se funde en el misterio
de un tango acariciante que gime por los dos.
Y el bandoneón
-¡rezongo amargo en el olvido!-
lloró tu voz,
que se quebró en la densa bruma.
Y en la desesperanza,
tan cruel como ninguna,
la vi partir sin la palabra del adiós.
Era mi mundo de ilusión,
lo supo el corazón,
que aún recuerda siempre su extravío.
Era mi mundo de ilusión
y se perdió de mí,
sumiéndome en la noche del dolor.
Hay un fantasma en la noche interminable,
hay un fantasma que ronda en mi silencio.
Es el recuerdo de su voz,
latir de su canción,
la noche de su olvido y su rencor.
La vi llegar...
¡Murmullo de su paso leve!
La vi llegar...
¡Aurora que borró la nieve!
Perdido en la tiniebla, mi paso vacilante
la busca en mi terrible camino de dolor.
Y el bandoneón
dice su nombre en su gemido,
con esa voz
que la llamó desde el olvido.
Y en este desencanto brutal que me condena
la vi partir, sin la palabra del adiós…
I saw her arrive…
Caress of her slender hand!
I saw her arrive…
Lark battered by the snow!
Your love, I could tell her, melts into the mystery
of a caressing tango that moans for both of us.
And the bandoneon,
bitter grumble into oblivion!,
cried for your voice
that was broken in the thick haze.
And in despair,
cruel as no other,
I saw her leave without a word of goodbye.
She was my world of hope…
The heart knew it,
it still remembers, always, her going astray.
She was my world of hope
and got lost for me,
plunging me into the grieving night.
There’s a ghost in the endless night,
there’s a ghost that haunts my silence.
It’s the memory of her voice,
the beating of her song,
the night of her oblivion and her rancour.
I saw her arrive…
Murmur of her light steps!
I saw her arrive…
Dawn that erased the snow!
Lost in the dark, my hesitant steps
look for her along my terrible path of pain.
And the bandoneon
calls out her name with its grumbling,
with that voice
that called her from oblivion.
And in this brutal disillusion that condemns me
I saw her leave, without a word of goodbye…